Declaración oficial: 27 de octubre de 2006 en reunión de la UNESCO en París.
Superficie: 199.140,28 hectáreas (la mayor de Castilla y León y la tercera mayor de la Península Ibérica).
Población: 48.813 habitantes en 88 municipios.
Coordenadas del punto central: 5º 52’ 30’’/40º 30’ 46’’
Dimensiones de la zonación:
Zona núcleo: 24.384,71 hectáreas
Zona Tampón: 113.196,86 hectáreas;
Zona de Transición: 61.558,71 hectáreas;
Entidad encargada de la gestión: Asociación Salmantina de Agricultura de Montaña
Dirección: Calle Castillo Nº1 C.P.: 37671 San Esteban de la Sierra
Tlf: 923 435300
Personal encargado: Jesús Isidoro Pierna Chamorro: Gestor
Ángel de Prado Herrera: Gerente de ASAM
www.biosfera.bejar-francia.org
El conjunto de características como son la zona de armonía de ecosistemas mediterráneo y atlántico, la diferencia altitudinal, la extensa red hidrográfica y las variadas condiciones climáticas conllevan la existencia de una enorme variedad de ecosistemas que van desde alta montaña hasta bosques de ribera, pasando por roquedos, canchales, turberas, numerosos bosques de especies diferentes entre los que destacan encinares, melojares, rebollares, castañares, madroñales, formas adehesadas, fresnedas y pinares. Junto a ellos la presencia de diferentes asociaciones de matorrales, algunas zonas lacustres donde destacan diferentes lagunas de alta montaña y el embalse de Santa Teresa.
Esta gran cantidad de ecosistemas definen una elevada biodiversidad marcada por la existencia de más de dos mil especies de flora con varios endemismos peninsulares e incluso algunas especies únicamente presentes en la RBSF. Ligado a los ecosistemas y las especies de flora se encuentra la fauna con una gran variedad de especies donde destacan la presencia de especies emblemáticas como el lince ibérico, la cigüeña negra los buitres leonado y negro, las águilas real y perdicera, la nutria y diferentes especies de caza.
Junto a estas características naturales la presencia humana se hace esencial para entender la idiosincrasia de esta Reserva de la Biosfera. El hombre ha modelado el paisaje con sus prácticas que, desde tiempos muy remotos han dado cobijo a sus habitantes. Siendo una comarca eminentemente ganadera donde destacan las prácticas tradicionalmente extensivas de ganadería bovina, ovina y caprina y el aprovechamiento del cerdo ibérico que ha provocado la Denominación de Origen del Jamón de Guijuelo que valora la preparación alimenticia, condiciones y calidad de este alimento. Destaca la apicultura siendo la máxima exportadora de miel y jalea real de toda la Península Ibérica. Junto a estas prácticas ganaderas la agricultura ha conformado un característico paisaje en forma de bancales determinado por las dificultades orográficas que provoca el paisaje montañoso de la RBSF. Entre las prácticas agrícolas destaca la viticultura con varias bodegas que aprovechan la variedad de clases de uvas donde la más importante es la "rufete" típica de la zona que ofrecen unos excepcionales vinos. Las cerezas y el olivo completan la agricultura determinando unos productos alimenticios de gran calidad que han servido de alimento a los habitantes de la RBSF a lo largo de los siglos.
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